martes, 24 de noviembre de 2009

No me muevo.

Hoy me quedo aquí. No muevo un solo centímetro. Me arropo entre la brisa que se escapa de tus labios. Ser yo mismo en estos días se está haciendo complicado. Vivir entre mi ropa y caminar en mis zapatos se va descubriendo cada día más ajeno a mi, desconcertante, menos placentero. Pero hoy me quedo aquí, no me muevo...



Empújame.